Después del intento fallido de la media maratón de Salamanca el pasado fin de semana, toca reflexionar y buscar nuevos objetivos.
Han sido unos cuantos días dándole vueltas a la manera de afrontar lo que queda de mes de marzo, en el que había dos objetivos claros, las dos medias maratones y otro más pequeñito pero ilusionando, el cross de montaña de Aldea del Rey Niño.
Como os conté, me tuve que retirar del primero de los retos por problemas en el gemelo, lo que me ha hecho plantearme los otros dos, y aunque la decisión es difícil, espero no arrepentirme.
Por un lado, he decidido no participar en la media maratón de Segovia, ya que me quiero centrar en entrenar para recuperarme de los problemas del gemelo y seguir mejorando. Por otro lado, el cross de montaña lo tengo que correr por que corro en casa, y además puede ser una buena manera de coger sensaciones de cara al resto de carreras que vendrán más adelante.
Un mes que iba a ser mes de sumar muchos kilómetros, puede convertirse en un mes mucho más tranquilo de lo esperado. Ahora mismo no quiero pensar en objetivos, sino en coger fuerza y sobre todo motivación para los próximos retos que vendrán más adelante. Esta semana tocó sólo un entrenamiento en cuanto a correr, 7 kilómetros probando que el gemelo sigue molestando... Ahora toca eso, fortalecer en el gym y buscar mejorar todo lo posible.
Rendirse nunca será una opción, asique trabajaremos en el gimnasio para fortalecer piernas y perder algo de peso para estar más fuerte. Tengo la sensación de que aunque ahora va a costar volver a coger sensaciones, si consigo entrenar como yo quiero y hay fuerza de voluntad pronto estaré con más nivel del que tengo ahora mismo.
Al final el running te da todo lo que inviertes en el, y si inviertes tiempo y ganas, te lo devuelve en forma de buenas marcas y felicidad...
Han sido unos cuantos días dándole vueltas a la manera de afrontar lo que queda de mes de marzo, en el que había dos objetivos claros, las dos medias maratones y otro más pequeñito pero ilusionando, el cross de montaña de Aldea del Rey Niño.
Como os conté, me tuve que retirar del primero de los retos por problemas en el gemelo, lo que me ha hecho plantearme los otros dos, y aunque la decisión es difícil, espero no arrepentirme.
Por un lado, he decidido no participar en la media maratón de Segovia, ya que me quiero centrar en entrenar para recuperarme de los problemas del gemelo y seguir mejorando. Por otro lado, el cross de montaña lo tengo que correr por que corro en casa, y además puede ser una buena manera de coger sensaciones de cara al resto de carreras que vendrán más adelante.
Un mes que iba a ser mes de sumar muchos kilómetros, puede convertirse en un mes mucho más tranquilo de lo esperado. Ahora mismo no quiero pensar en objetivos, sino en coger fuerza y sobre todo motivación para los próximos retos que vendrán más adelante. Esta semana tocó sólo un entrenamiento en cuanto a correr, 7 kilómetros probando que el gemelo sigue molestando... Ahora toca eso, fortalecer en el gym y buscar mejorar todo lo posible.
Rendirse nunca será una opción, asique trabajaremos en el gimnasio para fortalecer piernas y perder algo de peso para estar más fuerte. Tengo la sensación de que aunque ahora va a costar volver a coger sensaciones, si consigo entrenar como yo quiero y hay fuerza de voluntad pronto estaré con más nivel del que tengo ahora mismo.
Al final el running te da todo lo que inviertes en el, y si inviertes tiempo y ganas, te lo devuelve en forma de buenas marcas y felicidad...
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